Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), en España han fallecido por suicidio 4.003 personas durante el año 2021 (una tasa ajustada por edad de 8,45 personas por cada 100.000 habitantes).
Investigadores de la Universidad Complutense de Madrid, del Centro de Investigación Biomédica en Red de Salud Mental (CIBERSAM) y del Hospital del Mar de Barcelona han presentado la evolución de los datos de mortalidad por suicidio en nuestro país en este milenio (desde 2000 a 2021). Datos anónimos procedentes de un análisis temporal de 2000-2021 que se desprenden de la investigación del consorcio SURVIVE y de la acción de vigilancia epidemiológica de la Plataforma Nacional para el Estudio y la Prevención del Suicidio a partir de los fallecimientos y microdatos asociados fruto del convenio con el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Los investigadores del CIBERSAM Alejandro de la Torre, investigador principal del Grupo de Investigación en Epidemiología Psiquiátrica y Salud Mental de la Universidad Complutense; Víctor Pérez, director Instituto de Neuropsiquiatría y Adicciones del Hospital del Mar (INAD) y catedrático de Psiquiatría de la Universidad Autónoma de Barcelona; y José Luis Ayuso, catedrático en Psiquiatría y Director del Centro Colaborador de la Organización Mundial de la Salud para Investigación y Formación en Servicios de Salud Mental en la Universidad Autónoma de Madrid, han dado a conocer en la Facultad de Medicina de la Complutense el Informe de la evolución del suicidio en España desde 2000-2021,con especial interés en el papel jugado la pandemia por COVID-19.
Del análisis se desprende una tendencia creciente de mortalidad por suicidio en España desde 2018. Dicha tendencia se ha visto cristalizada en 2021, donde se observa un crecimiento anual del 6% con respecto a 2018, año en la que comienza un ciclo creciente en la serie de 2000-2021. Esto refleja el fuerte impacto de la pandemia en el aumento de la mortalidad por suicidio en España.
En 2021 se corroboran las tendencias poblacionales vistas en años anteriores: una mayor tasa de muertes por suicidio en hombres y en personas de mediana edad (40-64 años). Es de especial interés el aumento de mortalidad por suicidio en personas no nacidas en España. Nuestra tasa de mortalidad se va acercando peligrosamente a la media mundial marcada por la OMS. Provincias de las comunidades autónomas de Galicia, Andalucía, Castilla y León, Cataluña y Aragón son las que más se han visto afectadas por la mortalidad por suicidio, presentando las mayores tasas de mortalidad por suicidio en España en 2021.
En relación a los dos años de pandemia analizados (2020 y 2021), se ve un claro efecto en el número de muertes por suicidio, tanto en hombres como en mujeres, tanto en personas nacidas en España como fuera de España.
Se observa un crecimiento de casi el 25% en mortalidad por suicidio en personas migrantes, números que convierten a este grupo en el más afectado por la pandemia. Por otro lado, solo el grupo de personas de mediana edad presenta un aumento de muertes por suicidio durante la pandemia. Especulamos que las medidas de control de la expansión del virus (ej., cierre de servicios en momentos iniciales de la pandemia, medidas de distancia social, dificultades económicas derivas, etc.) podrían estar detrás de este efecto.
Finalmente, son las personas de grandes ciudades y capitales de provincia (donde la implantación de las medidas de control de la pandemia ha dado lugar a una mayor alteración de la vida cotidiana) las que han visto también un mayor efecto de la pandemia en la mortalidad por suicidio.
Once personas fallecieron al día por suicidio en España en 2021, suponiendo una tasa cruda de mortalidad por suicidio de 8.45 fallecidos por cada 100000 habitantes. Las cifras de 2021 nos dicen, en línea con lo observado en la serie temporal de 2000-2020, que 3 de cada 4 personas que fallecieron por suicidio en 2021 fueron hombres (en concreto, 2.982 casos). La mitad de los fallecidos tenía una edad comprendida entre los 40-64 años (en concreto, 2.016 personas). Respecto a las demás franjas etarias, un 31% de los fallecidos tenía 65 años o más, un 13.8% tenía entre 25 y 39 años y un 5% entre 10 y 24 años. No se observó ningún caso de muerte por suicidio en menores de 10 años durante el 2021.
En relación al país de procedencia, el 87% de las personas fallecidas por suicidio (3.490 personas), son nacidas en España; el resto (12.7%) nacieron en otros países. En relación al lugar de residencia de los fallecidos, un 32% de las personas fallecidas vivían en capitales de provincia. Casi un cuarto de los fallecidos vivía en zonas rurales (municipios de menos de 10.000 habitantes) o municipios urbanos de entre 10.001-50.000 habitantes (24.6% y 24.7%, respectivamente). El resto, vivían en ciudades grandes (más de 50.000 habitantes, no siendo capital de provincia).
En relación a distribución temporal y espacial del suicidio en España en 2021, se observa que en prácticamente todos los meses (excepto enero y agosto) hay mayor número de personas fallecidas en 2021 que en los años de 2019 y 2020. Asimismo, se observa el mismo patrón estacional que en otros años: un claro aumento de la mortalidad por suicidio en los meses de verano. De hecho, es julio el mes donde se encuentra un mayor número de fallecidos dentro del 2021, superándose los 400 fallecidos por suicidio en un solo mes (Figura 2).
En relación a distribución geográfica (Figura 3), se observan las tasas más altas de mortalidad por suicidio (tasas superiores a 10 por cada 10.0000 habitantes) en Galicia (todas las provincias), en Asturias, Castilla y León (provincias de Zamora, León, Palencia, Burgos y Ávila), Aragón (Teruel y Huesca), Cataluña (provincia de Gerona) y Andalucía (provincias de Córdoba, Jaén, Málaga y Granada).
Las provincias con mayor tasa de mortalidad por suicidio en 2021 fueron Jaén (13.1 por cada 100.000 habitantes), Zamora (14.2 por cada 100.000 habitantes) y Lugo (15.6 por cada 100.000 habitantes.
Un total de 26 de las 50 provincias españolas más las dos ciudades autonómicas (52% de las provincias) sobrepasan la media de mortalidad por suicidio mundial, indicada por la Organización Mundial de la Salud para 2019 (9 fallecidos por cada 100.000 habitantes). En cambio, las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, y las provincias de Guadalajara y la Comunidad de Madrid, presentan las tasas más bajas del estado.