Por tercera año volvió a la Semana de la Ciencia de Madrid #ImproCiencia, una iniciativa organizada por el Centro de Investigación Biomédica en Red (CIBER) para dar a conocer de una forma divertida qué es el CIBER y algunas de las investigaciones de sus distintas áreas temáticas.
En esta tercera edición -que tuvo lugar el jueves 11 de noviembre en el salón de actos Ernest Lluch del Instituto de Salud Carlos III y que fue inaugurada por Margarita Blázquez, subdirectora General de Redes y Centros de Investigación Cooperativa- participaron las áreas de Fragilidad y Envejecimiento Saludable (CIBERFES), Salud Mental (CIBERSAM) y Respiratorio (CIBERES). Para su desarrollo, se realizaron dos turnos, el primero de los cuales fue retransmitido en streaming mediante el canal Youtube del CIBER y a cada uno de ellos asistieron más de un centenar de estudiantes de ESO y bachillerato de centros de Madrid.
Luzma García, responsable de Transferencia Tecnológica del CIBER, hizo una breve introducción de cada uno de los proyectos presentados que fueron intercalados con dinámicas de la compañía de improvisación teatral Impro Impar.
Representando al CIBERSAM, Inés Ibarra Lecue -que actualmente se está formando en la Universidad de Columbia (Nueva York, EE.UU.) y que ha sido investigadora CIBERSAM en el grupo de Javier Meana, Universidad del País Vasco- una serie de preguntas a modo de concurso "Quiero ser millomario" sobre la relación entre el consumo del cannabis y la aparición de la esquizofrenia en la adolescencia, base de su investigación. Para dar respuesta a todas sus preguntas, implicó a los estudiantes y solicitó el "comodín del público".
Además, para ilustrar el efecto que produce el cannabis en la adolescencia, la compañía ImproImpar representó una serie de escenas contrastadas. En las primeras versiones un actor representaba -con la intervención del público que iban orientando la escena- situaciones cotidianas vista por un consumidor del cannabis y posteriormente esa misma situación vista objetivamente desde fuera. La impro permitía contemplar lo que realmente estaba sucediendo, muy distante del mundo figurado por el consumidor de cannabis. De esta forma se ponía de manifiesto los efectos de distorsión de la realidad que puede provocar el consumo de esta droga en la adolescencia.
Para finalizar, esta puesta en escena del CIBERSAM en la que se acercó la ciencia a los estudiantes, Inés Ibarra motivó a los asistentes (presenciales y online) a incentivar su "curiosidad" y a seguir una carrera investigadora.